17.7.19

Es lo que quiero, pero ahora que ya llego el momento que tanto espere, me cuesta irme así como si nada y dejarte acá. 
Nunca me voy a olvidar la noche que me leíste, y llorando me abrazaste. Me diste ese abrazo sincero que necesitaba. Gracias por entenderme esa noche, por haber abierto esta pagina sin saber con que te ibas a encontrar. Por algo fue que tuviste que abrirla y llegar hasta este pedacito de mi, donde muy de vez en cuando vengo a escribir porque nadie lo conoce. 
Se que no fue fácil convivir conmigo, sobretodo al principio. Perdón si alguna vez dije o hice algo sin pensar. Tampoco fue fácil para mi amoldarme a vos, tus formas y tu mente abierta y liberal, la cual admiro y mucho. Ojala haya aprendido un poco de tu forma de ver el mundo en estos años. No me había dado cuenta de lo afortunada que era de tener un hermano como vos, hasta que nos toco vivir juntos. Y eso es lo mas lindo que me llevo de estos tres años de cambios. 
Gracias por cada detalle y cada momento compartido.
Se que cuento con vos siempre, y espero que vos sepas que también lo haces conmigo, sin importar cuan lejos o cerca estemos.
Te quiero mucho, para siempre.