17.10.17

Nada cambio.
Ayer volví de casa, una vez mas sin saber si estoy en el lugar correcto.
Una vez mas con las ganas de no querer volverme nunca mas, pero con el miedo de no saber, de no poder tomar ese camino de una vez, de no decepcionar(me). 
Y una vez mas, con un sentimiento de tristeza que me inunda por dentro, pero que sigue ahí estancado y demuestra sonrisas para no tener que ponerse a explicar.
Otra vez sola frente a la computadora, y con mil trabajos apilados al costado, esperando que se hagan solos para poder descansar. 
De vuelta las ganas de llorar que terminan no solucionando nada. 
Queda poco, solo dos meses. 
Pero la espera se me hace infinita, cada día que pasa se me hace mas pesado. 
Extraño. 
Extraño y mucho.